La Torre se cae, ve entre las tinieblas el averno, se oyen las cadenas ,ruge el león de plata asustado desde su trono, testigo silente de un fin anunciado , las calles huelen a orco el aire a miedo, silencio, desesperación .... No hay campanas que anuncien regodeo, las aves gimen sin plumas, llevan atadas a sus patas piedras de acero...El rey se ha caído y sobre él, el peso de su culpa...
Angustiosos ojos del deleite , el placer hecho pecado, turbas con tu éxtasis privado a aquellos que caen a tus pies enviciados por el humo de tu codicia, egoísmo, vileza, doblez aturdiendo con esto la paz del reino nirvana....
Ofuscados buscamos tus manos callendo sin querer en brazos de belcebú que nos envuelve y nos marea con tanto fasto, buitres solo eso somos, carroña inmunda, el hedor del universo, con nuestros mezquinos instintos destruimos el perfecto equilibrio de la naturaleza.
!Yahvé!, rendidos a tus pies imploramos clemencia pero no nos oyes y el látigo de tu indiferencia nos da en la cara, nos arrastra, nos golpea, nos deja sin aliento estamos construyendo tu mundo con avaricia y dolor, consecuencia de nuestra mala entraña....
El Método, el Secreto, el Misterio, alimenta nuestra voluntad y ambición desmesurada las respuestas solo las tienes tú, las sabes tú, perdona nuestra osadía y permite que entre la humildad en nuestro corazón que ya fatigado esta de profetas del averno.....
No abras las Puertas del castigo, que estas se tapien con tu Amor y esperanza, detened a Luzbel y su séquito , ampara a los Angeles caídos que lamen sus heridas y se revuelcan en el vómito de su perversidad.
....El Dragón de fuego ha despertado, las siete serpientes extienden su veneno por los cinco reinos el principe tartufo viene en su tartana arúspice lo llaman...
(Julia Isabel Cervantes)
