el frío me helaba las entrañas, observaba las montañas verdes y frondosas el camino era dificultoso sin embargo no podía detenerme, de pronto escuchaba un llanto muy agudo eso llamo mi atención me dirigí hacia el lugar de donde venía había un riachuelo que me señalaba el camino detrás de una enorme roca se hallaba una mujer vestida de malva, lloraba desconsoladamente estaba sentada en medio de muchos papeles y fotografiás lo raro es que esas fotos eran de niños muchos con rostro triste o llorando igual que ella, al verme se abrazo a mi decía cosas que no podía comprender como si hablase en otro idioma, lo raro es que hace unos meses soñé con mi abuela y me pasaba lo mismo me decía muchas cosas que no podía decodificar, en fin la mujer de este sueño parecía triste y desesperada me transmitía su angustia fue como si se conectara en breves segundos a mi mente y a mi corazón yo sentía claramente su dolor y era infinitamente agudo y triste.
Empezó a llover con mucha fuerza tanta que de pronto el montón de papeles y las miles de fotos se convirtieron en cenizas y se iban de prisa por la corriente del río y ella solo lloraba aferrada a mi, tenia algo en sus manos lo puso en la mía eran muchas semillas ella me decía que eso era su corazón que lo protegiera de tanta tristeza, empece a llorar con ella como sin consuelo, en medio de esa extraña tormenta empece a rezar y desperté muy exaltada no sé fue un sueño muy raro.
Desde hace unos meses no me dejen en paz las pesadillas tal vez es porque mi corazón esta con miedo y muchas dudas, tenia la esperanza de hablar con alguien en concreto pero esa cita no es probable es un encuentro imposible, moriré con la incertidumbre, y con muchas preguntas sin respuesta, creo que esta angustia terminara matándome tal vez yo sea esas cenizas que veía corriendo por el río necesito paz y olvidarme de todo lo que me a sucedido, no sé porque lo hicieron porque fue la victima de sus macabros juegos y tampoco se con certeza cual sera mi final.
Lo único que me ha mantenido viva es la inmensa fe que tengo en Dios y la esperanza de hablar con quien deseaba lo segundo no sera posible jamas pero estoy convencida que ella no tuvo nada que ver su corazón es demasiado noble como para prestarse a obrar en contra de los demás, necesito olvidar pero por mas que lo intento ni los sueños me dejan ha sido todo tan fuerte e inverosímil, que ni aun viéndolo una y mil veces oyéndolo dos mil aun así no me lo creo, a veces los ojos del corazón confunden a la razón, y presiento que este golpe ha sido tan fuerte que no hay esperanza de volverme a levantar, por mas que lo intento las risas no dejan en paz mi testa. “Abre los ojos, espabilate” es una frase que no se borra tampoco de mi testa. Dios mío no me abandones aunque el resto del mundo me abandone te lo ruego.
