miércoles, 19 de septiembre de 2012

Me gusta Dios y todas sus excentricidades…


Me aburro, últimamente nada desborda mi emoción, tengo un severo cortocircuito en el corazón, será que a mi edad ya nada me asombra o me sorprende, la música encarámela mis sentidos, pero no coordina con la tristeza de mis pensamientos, a lo lejos se distingue una pintura abstracta en el claroscuro de mis pupilas, hojas marchitas entretejen mi piel, faz de resignado desconsuelo.
 Desganado el espíritu, desenreda los hilos que acongojan el alma, envejecen el animo y la razón. Tirano enemigo el tiempo, que cubre los cabellos de plata, resta minutos a los sueños, y en cada tic-tac nos anuncia que se va acercando el momento.

En este simple, insignificante y breve paseo cotidiano es difícil comprender porque lo esencial es invisible a los ojos, por qué nos hace tan felices, una puesta de sol, una gota de lluvia,  un mar alborotado, o la simple caricia del viento, por qué en el corazón se encuentra la verdadera sabiduría de los hombres.

La vida esta llena de misterios, de conceptos, de absurdos análisis que recrean un perfil de lo que mas o menos somos o pretendemos ser, la filosofía la invento algún sicólogo, a mi me gusta el negro, el rojo, los girasoles, el café, los perros, la lluvia, los niños, los bosques, las montañas, la música en su máxima expresión, la poesía, lo paranormal, la gente extraña que no sigue a la manada,  me gusta Dios y todos sus significados, su amor en cualquier idioma suena bien, según los entendidos bajo todas estas cosas se encuentran rasgos de mi personalidad, en la vida siempre tenemos que estar rebuscándolo todo, forma parte del proceso de aprendizaje.

Llevo muchos años, caminando por la cuerda floja, saboreando las verdes y maduras las frutas que todos degustamos, eso se llaman crecer, mi alma aun vaga en pañales, mi espíritu aun es muy crío,  me gusta Dios porque en él  he descubierto a un buen amigo, un silente pero astuto compañero de viaje, siempre que mi linterna se queda sin pilas él enciende la suya, procura no dejarme a oscuras, aunque camine a tientas y en tinieblas.

Me gusta Dios y todas sus excentricidades… 

Julia Cervantes