viernes, 16 de julio de 2010

Killá

Cuentan que un día,
nació una niña,
en una gélida torre,
al final de una abadía,
su padre fue el mar,
su madre la tierra,
una noche de estrellas
le salierón Alas
y pudo volar,
su cobijo fue el cielo,
su refugio una nube
de color salmon,
Su Hada Madrina
le concedio el Don
de alumbrar
las noches
e inspirar poetas,
vive eternamente
enamorada del Sol
Luna la llaman
por ser la mas bella...
(Julia Isabel Cervantes)